Entrevistamos a Clara Pareja Rossell, adjunta a la Dirección Asistencial de Atención Primaria del Institut Catalá de la Salut. Su ponencia en la mesa-debate sobre actividades y estrategias para un uso seguro de los medicamentos, a celebrar en la X Jornada de Seguridad del Paciente en Atención Primaria, versará sobre “Sistemas de ayuda a la prescripción orientados a la seguridad del paciente”.
Sano y salvo.: Por favor, explícanos en qué consisten las dos herramientas que vas a exponer en la mesa de la Jornada: PREFASEG y el Selfaudit.
Clara Pareja: Las estaciones clínicas de trabajo de Atención Primaria del Institut Català de la Salut en el módulo de prescripción electrónica, disponen de herramientas integradas que permiten prevenir los riesgos asociados al uso de medicamentos.
PREFASEG es una herramienta integrada que valora ontime cada nueva prescripción. El sistema activa una serie de alertas clínicas con valoración del riesgo y emite recomendaciones en función de las características clínicas del paciente que aparecen en el momento de la prescripción. El profesional puede escoger entre cancelar o continuar con la prescripción. Las alertas se activan en caso de: interacciones, contraindicaciones, fármacos desaconsejados en geriatría, alergias, duplicidades o fármacos teratogénicos. Además, las alertas se clasifican mediante un código de colores en función de si el riesgo es moderado o grave. En el caso de activación de la alerta se ofrece información relacionada: una resumida visible en la misma pantalla y otra extensa a la que puede accederse a través de un vínculo específico desde la misma pantalla.
Por lo tanto, PREFASEG se trata de una herramienta que identifica el riesgo potencial de forma proactiva en el momento de la prescripción y permite tomar decisiones, basadas en recomendaciones sustentadas por la evidencia, antes de que se produzcan problemas de seguridad.
El Selfaudit es una herramienta integrada que facilita la revisión sistemática de pacientes con medicación activa y proporciona soporte al profesional para la gestión del cambio. El sistema identifica casos en los que aparecen duplicidades, contraindicaciones, polimedicación, alertas de seguridad, fármacos desaconsejados en determinados grupos de población (por ejemplo, gastroprotección en geriatría) y duración de tratamiento inadecuada. A través de un apartado de la estación clínica de trabajo, los profesionales acceden a los listados de pacientes que cumplen dichas características y pueden acceder a la historia para revisar el plan de medicación y modificarlo a partir de la información sobre el riesgo específico de la medicación para el paciente y de la recomendación emitida que se ofrece desde la pantalla.
Por tanto, se trata de una herramienta que identifica el riesgo potencial postprescripción y que permite al profesional la revisión autónoma de potenciales problemas relacionados con los medicamentos de forma periódica y sistemática.
S. y s.: ¿Por qué es importante que el médico de familia revise periódicamente los tratamientos de los pacientes con una atención especial en los aspectos de seguridad? ¿cada cuánto tiempo se debería realizar esta revisión?
C. P.: La actividad en la consulta de Atención Primaria puede no permitir la revisión sistemática de todos los aspectos relacionados con la medicación y es preciso contar con herramientas que identifiquen aquellos casos de mayor riesgo para poder revisarlos y reflexionar pausadamente sobre la necesidad de introducir cambios. Los efectos que pretende esta revisión son: mejorar la seguridad del paciente reduciendo los problemas relacionados con la medicación, eliminar la medicación que el paciente no necesita, añadir el fármaco que necesite el paciente y que no esté en su plan terapéutico, mejorar los resultados en salud y el control de sus patologías, y mejorar la calidad asistencial y la calidad de vida.
La periodicidad de la revisión dependerá de la capacidad de atender a las alertas que se producen día a día y de la dinámica de la consulta. Cuanto más se resuelva en el día a día, menos casos quedarán pendientes de revisar. Es difícil definir una periodicidad idónea. La literatura aconseja realizar revisiones cada 6-12 meses según el número de medicamentos que toma el paciente, aunque si la periodicidad es más frecuente, ello evitará riesgos innecesarios para los pacientes y no supondrá una sobrecarga de trabajo para el profesional. De todas formas, cuando se empiezan a utilizar estas herramientas es conveniente reservar un espacio de tiempo para la reflexión e introducción de cambios.
S. y s.: El hecho de tener integradas ayudas en la herramienta de prescripción electrónica, ¿facilita la revisión clínica de los tratamientos? ¿reduce los errores? ¿disponéis de datos que lo confirmen?
C. P.: En 2015 y gracias a SELFAUDIT, los profesionales de Institut Català de la Salut redujeron en 9.116 casos el número de redundancias terapéuticas (duplicidades), resolvieron 3.603 contraindicaciones relacionadas con fármacos con notificaciones de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios y realizaron 6.165 acciones de deprescripción en pacientes con polimedicación.
PREFASEG generó 2,4 millones de alertas (57% relacionadas con duplicidades y 34% con interacciones medicamentosas).
Las dos herramientas se complementan y favorecen la revisión, permitiendo consultar los datos del paciente en el mismo momento al estar integradas en la estación clínica de trabajo. Los resultados de los contratos de gestión relacionados con este tipo de alertas son positivos, demostrando el uso de estos sistemas para mejorar la seguridad de los pacientes en el área del medicamento.
S. y s.: ¿Qué aceptación han tenido las dos herramientas entre los profesionales del Institut Catalá de la Salut?
C. P.: El Institut Català de la Salut ha optado por desarrollar estas herramientas con una orientación clínica y muy operativa para facilitar la gestión clínica a los profesionales. Para el desarrollo de estas herramientas se ha contado con médicos de familia, farmacéuticos y farmacólogos del área asistencial. Las alertas y los listados integrados en la estación clínica de trabajo son herramientas muy valoradas por los profesionales. No obstante, la gran cantidad de alertas que se generan nos lleva a la reflexión de cómo gestionarlas en el día a día para que no se conviertan en un obstáculo y se les de la atención que merecen.
La seguridad de los pacientes es una de las líneas estratégicas del Institut Català de la Salut. Por ello, desde hace años incluye en los contratos de gestión de los equipos de atención primaria objetivos relacionados con la resolución de los problemas de seguridad del medicamento. Los cuadros de mando incluyen información relacionada para que los directivos y líderes clínicos puedan favorecer estrategias de implementación de las herramientas y resolución de casos. Todo ello ha contribuido a la integración de estas herramientas en la práctica habitual de los profesionales de Atención Primaria.
Publicado por Sano y salvo.
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